Con este caballerito rumano, corrimos algunas aventuras (no muy santas), para poder comprar una Fender Stratocaster, importantísima para poder sacar adelante su grupo de rock.
"Coco, qué duro es intentar dominar la música" , me decía.
¡Ya estas por acá, nuevamente, queridísimo amigo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario