Diez, señores y señora, diez institutos tecnológicos.
La idea
que acá expongo es similar a la que propuse el año 2.006: La creación de “Cinco
Institutos Tecnológicos para Bolivia”, que usted lo puede encontrar en la despensa de mi blog.
Ese
librito me permitió ingresar a varios ambientes: A las distintas comisiones del
parlamento, a los ministerios y a varias oficinas menores. En esos momentos, cómo me divertí viendo la tremenda admiración que les causaba a mis oyentes, el enterarse que nuestros minerales también tenían muchos metales preciosos y
estratégicos.
En
fin, me dediqué a hablar con políticos de quienes, desafortunadamente, lo
técnicos aún dependemos. Todos, sin faltar ninguno, acabaron diciéndome: ¡oh,
Jorge! Pero de ahí no pasó.
Incluso
me aposté en la Plaza Murillo para pedirle a gritos al Presidente una audiencia:
Todo en vano.
No
pienso volver a repetir la hazaña. Me he limitado a enviarle una carta a una autoridad
gubernamental con el nuevo texto aunque, claro, sin dibujitos. Tal vez me llame,
tal vez no, no tiene mucha importancia.
1 comentario:
Lindo como siempre buen trabajo
Skickat från min iPhone
Cocus
Publicar un comentario