15 de septiembre de 2015

PERÚ JAZZ

Este grupo nació en el Perú. Dos de sus integrantes, hace treinta años que tocan juntos. Estos jóvenes tampoco le pudieron decir chau a sus raíces y se dedicaron a andar por las fusas de la música de su país, para crear algo propio, lo que evidentemente, no les llovió del cielo. 

"Queremos comparti con ustedes nuestra creación"

Manongo Mujica



Ellos proclaman que desean hacer “funcionar la tradición”, pero no al garete sino “respetándola y buscando en ella”. Y es verdad, con esfuerzo se distinguen las raíces musicales, que se siente que están ahí vibrando, pero el arreglo es a veces tan complejo que, en los arabescos de noche, se los pierde vista.


Jean Pierre Magnet


Los que le dan vida a la banda, son el saxo (Jean Pierre Magnet), y la batería (Manongo Mujica). Aquél tocado a veces suavemente a veces fuerte, le otorga ese aire de Perú, con el que los paceños y paceñas catalogamos a la música de esas tierras tan cercanas e importantes para todos nosotros. En efecto, la prueba está en que no nos perdemos el simpático programa sabatino “Qué tal Perú”. 
Por su lado la batería tiene dos componentes, el instrumento y el batero. Aquél con dos o tres detalles que llamaron la atención: El uso de mazas para tocar el bombo, el platillo en espiral y uno otro, chillón. Respecto del hombre, estaba lleno de sorpresas. Apareció aporreando al instrumento con mazas para, de inmediato cambiarlas por las sutiles escobillas. A veces tocaba en los bordes de los tambores y cuando llegaba el turno del percusionista callaba, pero no profundamente, de repente se desperezaba, con uno u otro ruidito.


Cesar Ballunbrosio


En varias de las composiciones, la batería y el bajo fueron la base rítmica de canciones fuertes. Por su lado el percusionista (Cesar Ballunbrosio), nos parece que no entregó esta noche, toda su capacidad en el manejo de los instrumentos, pero que para el baile es un as. Su cuerpo grácil y sus piernas delgadas, le permitieron regalar al público un solo de sonidos de zapateo bien logrado.
Andrés Prado
El guitarrista (Andrés Prado), fue otro que le gusta hacer sus buenos solos, siempre desde la distorsión ácida del sonido de su guitarra.


En general, su música es bullanguera pero seria. Es posible que este resultado se deba a la influencia de la riqueza musical hallada y arreglada con tanta pasión.



Cesar bailando
Las composiciones. De entrada nos regalaron un “Salón de baile”, que retrató los salones de Lima (suponemos), de hace sesenta años. Luego una ruidosa marinera. Cuando le llegó el turno de cantarle a Chincha, la tierra de Cesar, el sacó su violín y acomodándolo en su cintura, empezó a tocar “Amador” (el nombre de su papá), que contagió a todos con su ritmo. 
Luego vino “Chincha Saudita” y por último, el mejor número, un huayno que nos hizo mover los hombros a todos. Tiene razón Manongo cuando dice: Hemos venido a compartir nuestra creación con la gente que quiere escucharla”. 
¡Bien Perú!

"Hacemos funcionar lo tradicional"

No hay comentarios:

JORGE DÁVALOS: ESTÉTICA DEL ELEMENTO CÁRNICO

En un ambiente pictórico raro y semioscuro, el gris y el rojo sucios se mezclan con trozos de carne, de grasas, de caras y de cuerpos despar...